Cuantas veces al día nos miramos al espejo, la verdad yo no muchas con suerte una en la mañana y otra vez en la noche, ahora bien algunos considerarán que es superfial el estar mirandose al espejo, pero yo les digo ¿Qué ven al mirarse al espejo?, se han preguntado:
¿Quién soy? ¿Quién habita dentro de mí?
Es necesario aprender a mirar nuestro rostro y detectar qué sentimientos refleja: ¿miedo, angustia, rencor, dolor? Un espejo bastará para descubrir otro secreto, que los ayudará a lograr lo que desean…recuerden siempre pensamientos positivos atraen experiencias positivas!
Volviendo al tema de mirarse en el espejo, pasamos la vida mirándonos al espejo: “¿Cómo me veo?”, “¿Me queda bien esta ropa?”, “¿Necesito un corte de pelo?”, nos miramos de reojo, generalmente encontramos algo negativo, en vez de encontrar y reafirmar cualidades, ¿Alguna vez te has detenido frente al espejo para observar tu interior? Tenemos tanta prisa que rara vez hacemos un alto para observarnos en vez de sólo mirarnos.
A continuación se describe un ejercicio “mágico”. Pasados 21 días notarás que has logrado establecer una gran conexión con tu interior.
Dicen que “los ojos son el espejo del alma”. A través de ellos, frente al espejo, miraremos la profundidad de nuestro ser. Detendrás unos minutos la celeridad en la que vives y te regalaras la posibilidad de conocerte. {Realizarlo todos los días}
El primer día te mirarás fijamente al espejo durante un minuto. Te preguntarás: ¿Quién soy? Y nombraras las características que te definen. Las enumeraras en voz alta, para que al escuchar tu propia voz, reafirmes lo que piensas de ti mismo.
[Puntual, impuntual, alegre, tímido, miedoso, simpático, inteligente, alto, bajo, etc.]
Es recomendable incluir todas las características que se te ocurran en el momento, aunque algunas de ellas se contrapongan con otras.
El segundo día aumentarás a dos minutos el tiempo de este nuevo hábito, agregando a tu lista más características, valores, virtudes y debilidades, así lo harás hasta llegar a cinco minutos diarios, después de 21 días, percibirás que tus rasgos han cambiado. Y que tu gesto y tu mirada son ahora más cordiales porque te has reconciliado contigo mismo y eres – eso se nota de inmediato- mucho más feliz.
La autoestima aumentará cuando reafirmes una y otra vez TUS VALORES y TUS VIRTUDES…
Dejaras de pensar y dar importancia a tus debilidades, eliges pensar que estás avanzando en el camino hacia la conciencia, hacia el rumbo que has decidido tomar y hacia la vida que quieres vivir.
A partir de hoy reprogramaras tu subconsciente para transformar tu vida. Lo reprogramarás con palabras positivas, pensamientos positivos y afirmaciones, así estarás en plena afinidad y sintonía con el Universo, pensando y hablando positivo.
Deseo saber qué ocurre en mí interior.
Me pregunto quién soy y enriquezco mí esencia.